Por: Lucía Gabrielle González.
Emiliano, el hijo de una amiga, me dijo que no quería verse esta película, ya que se había visto hace poco el Live Action de Disney, y sus palabras literalmente fueron: “¿Qué otra cosa me va a decir? Es la misma historia del niño de madera que no podía decir mentiras y se convierte en niño de verdad”, y personalmente yo pensé lo mismo cuando me propusieron verla. Aún así, lo hice.
Grande fue mi sorpresa cuando me topé con una película nada parecida a la que yo conocía. Claro, mantiene elementos propios de la historia que son innegables, como: El Hada Azul que le da vida a Pinocho, la ballena que se los traga, el Pinocho que le crece la nariz cuando dice una mentira, y la importancia de la consciencia (un tema que trataremos más a fondo más adelante desde la Lupa), y la encontramos personificada en pepe Grillo, no obstante, todo esto se realiza en un contexto histórico fuera de la ficción y con una profundidad de mensajes superior a la obra original.
¡Aquí te dejamos unos datos interesantes sobre esta producción!
1. Su contenido histórico:
Guillermo del Toro quiso crear conexión entre la película y el libro infantil del escritor italiano Carlo Collodi publicado en 1883 (versión original de esta narración), y lo logró al situarla en su contexto real.
La historia inicia en Italia aproximadamente en 1917, cuando recién termina la primera Guerra Mundial; y la trama principal se sitúa entre 1939-1945, durante la segunda Guerra Mundial. En estos años, el país europeo tuvo grandes cambios a nivel político e ideológicos, tal como se muestra en la cinta.
Otro detalle que nos confirma esto, es la participación de protagonistas históricos de este periodo como: Benito Mussolini, y la figura del podestà, una autoridad que encabezaba el gobierno de un municipio durante la Italia de ese tiempo.
2. Pinocho curioso:
En esta película, del Toro y su equipo lograron recrear un Pinocho que resalta una de las características más importantes durante la infancia: la curiosidad. Durante toda la película vemos que a Pinocho le encanta hacer preguntas, se sorprende con todo lo que ve, y trata de darle respuesta a lo que no entiende en su entorno.
¡Y eso es parte de ser niño!
Explorar y tratar de entender qué está a nuestro alrededor.
3. Nos enseña que debemos hablar con nuestros padres.
En la versión tradicional de Pinocho observamos que él no va al colegio para ir a jugar a la feria. Sin embargo, en esta película vemos un contexto completamente diferente.
En esta nueva producción Pinocho regresa al Carnaval con la intención de poder ayudar a su padre al enviarle dinero y pagar su deuda. Sin embargo, sabemos que esa no es la responsabilidad de un niño.
En este caso Pinocho, en vez de hablar con su padre, decide solucionar las cosas por su cuenta y aparece el Conde Volpe, un personaje que se aprovecha de la inocencia de Pinocho y sus buenas intenciones.
Así que cuando sientas que tienes un problema, ya sabes, la mejor forma de solucionarlo es hablar con un adulto en el que confíes y que él o ella pueda aconsejarte.
4. “A veces los padres se desesperan como todo el mundo, y dicen cosas que sólo creen querer decir en ese momento, pero con el tiempo se dan cuenta que no quisieron decir eso”.
Esas fueron las palabras del Sr. Grillo cuando Pinocho estaba triste por lo que Geppetto le había dicho.
Esto nos advierte que algunas veces nuestros padres pueden enojarse, preocuparse o sentirse frustrados, y por esa razón, decir algo que nos lastime, pero no significa que lo digan en serio. Nuestros padres y/o tutores nos aman, pero siguen siendo seres humanos que pueden equivocarse y dejarse guiar por sus emociones.
Si alguna vez sentimos que algo de lo que dijo tu tutor hiere tus sentimientos, espera a que se calme y le comunicas tu malestar.
5. La ilusión de las mentiras.
Pinocho es una historia que nos enseña que el mentir está mal. En un momento, podemos sentir que las mentiras nos salvan de los problemas, pero estas siempre salen a la luz, y Guillermo del Toro quiso demostrarlo en su película.
Cuando Pinocho, Geppetto, el Sr. Grillo y Spazzatura están dentro del monstruo marino, la única forma de salir y salvarse, es que Pinocchio mienta, y así poder utilizar su nariz como puente. Pinocho lo hace, y siente como las mentiras lo salvan de su compleja situación. No obstante, cuando desea escapar el puente que hizo con su nariz se rompe y él cae al vacío.
Eso es lo que pasa con las mentiras. Podemos sentir que nos salvarán de todos nuestros problemas, pero las mentiras siempre salen a la luz, y en el proceso lastimamos a los demás y a nosotros mismos. Por eso lo mejor es siempre decir la verdad, y aso también lo podemos ver en la película. Al final, el monstruo estornudó y eso fue lo que en realidad salvó a Pinocho y a Geppetto.
¡Nunca fue necesario decir mentiras!
6. Por último, y tal vez lo más profundo y diferencial de esta película fueron las hermanas de la vida y la muerte.
Uno de los personajes que vimos más cambiados en esta nueva adaptación fue el Hada Azul. Estábamos acostumbrados a verla como una mujer hermosa que le dio vida a un muñeco para que acompañara a Geppetto en su soledad.
Sin embargo, en esta ocasión no solo tenemos a un personaje, sino dos. Dos espíritus que representan la vida y la muerte. La vida es la que le da a este niño de madera una conciencia, un amigo y un objetivo en su vida.
Pero debemos tener en cuenta, que aquí Pinocho es un ser inmortal, y cada vez que ocurre un accidente, se encuentra con este espíritu que le enseña la importancia de valorar los buenos momentos y las personas que lo quieren.
Otro suceso importante que notamos gracias a este personaje es cuando Pinocho por fin se convierte en un niño de verdad. Y no ocurre, como en la versión de Disney que aparece como un niño de carne y hueso, sino que en esta versión él logra hacerlo en el momento en que rompe las reglas y decide renunciar a su inmortalidad.
Nos preguntamos ¿por qué Pinocho hizo esto?
Pues, con esta película Guillermo del Toro quiere enseñarnos que la naturaleza del ser humano es amar y proteger a nuestros seres queridos. Cuando Pinocho se da cuenta de esto, y decide proteger a su padre, es cuando por fin logra convertirse en un niño de verdad.
Por último, te dejamos el tráiler de la película y te invitamos a que compartas en comentarios qué te pareció esta nueva versión de Pinocho.
¡Larga vida a las películas basadas en libros infantiles!
